Utiliza estos enfoques de sentido común para combatir la ansiedad, y para aumentar la unidad y la eficiencia de los equipos híbridos y remotos.
21 de mayo de 2021
Autor: Matt Cain
Utiliza estos enfoques de sentido común para combatir la ansiedad, y para aumentar la unidad y la eficiencia de los equipos híbridos y remotos.
Para 2022, el 25 % de la mano de obra del conocimiento a nivel internacional elegirá su hogar como lugar de trabajo principal, y el 45 % de la mano de obra trabajará desde casa dos o tres días a la semana. Algunos empleados están encantados con esta perspectiva. Otros, no lo están tanto.
Para muchos empleados, la novedad de trabajar desde casa ya se ha desvanecido y están ansiosos con la posibilidad de una mudanza permanente a un entorno de trabajo híbrido. Puedes ayudar a reducir tu ansiedad con unas reglas básicas simples para interacciones virtuales y otros retos laborales exclusivos de los equipos de teletrabajo e híbridos.
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Deberás personalizar tus pautas para garantizar que se adapten bien a cada equipo y a tu cultura corporativa, pero es importante centrar esas reglas básicas en mejorar tres aspectos del trabajo en equipo remoto e híbrido.
Fomenta la unidad interpersonal de tus equipos, que puede ser especialmente difícil de mantener en un entorno remoto, pero es fundamental para fomentar la participación y la inclusión colectivas del equipo. Los responsables deben ser empáticos y accesibles: esto puede marcar la diferencia entre una gran experiencia para los empleados y una no tan buena.
Los miembros del equipo suelen obtener sus principales señales de trabajo del comportamiento de su responsable directo, así que asegúrate de que los responsables modelen el comportamiento productivo. Por ejemplo, menciona explícitamente e ilustra la capacidad de cambiar los turnos de trabajo (para una visita al médico, consultar con un carpintero o cuidar a un niño enfermo) para reforzar la idea de que todos estamos juntos en esto.
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Promueve la transparencia sobre la forma en la que los equipos usan su tiempo y sea flexible en la coordinación de cómo se realiza el trabajo, centrándote en los resultados más que en su contribución. Por ejemplo, acuerda los resultados y los productos del trabajo, pero se flexible sobre cómo, dónde y cuándo el equipo cumple esos objetivos.
Esta estrategia refuerza la idea de que la participación de los miembros del equipo se valora por su contribución, no por su ubicación. La idea de “igualdad en la colaboración” es fundamental para eliminar las preocupaciones, actuales y futuras, de que los participantes en la oficina puedan verse favorecidos debido a su presencia física en un espacio de trabajo proporcionado por la empresa.
Proporciona una guía clara sobre qué tecnología y qué herramientas están disponibles, cuándo usarlas y para qué. Asegúrate de que todos los equipos funcionan correctamente y permite que los miembros del equipo mejoren su destreza digital, pero también deje claro que los empleados deben aprovechar su propia competencia digital como un ingrediente esencial en el teletrabajo y el trabajo híbrido efectivo.
Las reuniones virtuales constituyen un buen ejemplo. La organización de TI está a cargo del aprovisionamiento continuo de equipos y de la prestación de servicios de soporte efectivos, pero tus reglas básicas deben responsabilizar a los miembros del equipo para saber cómo usar todas las funciones relevantes y observar las buenas prácticas en materia de compliance (cumplimiento).
El diálogo del equipo sobre esas reglas básicas puede ayudar a tu equipo a sentirse más involucrado y que tiene el control de sus propias condiciones de trabajo remotas e híbridas.
Aquí damos siete ejemplos de los tipos de pautas de sentido común que puedes establecer para que los miembros del equipo híbrido y remoto se sientan más cómodos.
El giro hacia los entornos de trabajo híbridos acaba de empezar, y la mayoría de las empresas lo están descubriendo a medida que avanzan. Estas reglas son parte de este viaje y permiten que las personas y los equipos establezcan sus propios caminos a la vez que se adhieren a las pautas organizativas.
Las pautas no solo permiten la creación conjunta y la innovación de base del trabajo híbrido, sino que, además, ayudan a los nuevos miembros del equipo a determinar y adoptar rápidamente las normas culturales del equipo.