Para el 2023, los principales proveedores de servicios en la nube tendrán una presencia distribuida similar a un cajero automático para brindar servicio a un subconjunto de sus servicios para los requisitos de aplicaciones de baja latencia. Muchos proveedores de servicios en la nube ya están invirtiendo en formas de hacer que sus servicios estén disponibles más cerca de los usuarios que necesitan acceder a ellos.
Esta tendencia continuará a medida que aumente la granularidad de las regiones que están cubiertas por estos proveedores de servicios en la nube. Los “microcentros de datos” estarán ubicados en áreas donde se congrega una gran población de usuarios, mientras que los puntos de servicio en la nube “emergentes” soportarán requisitos temporales como eventos deportivos y conciertos.
Los equipos que admitan un subconjunto apropiado de servicios en la nube pública se alojarán en ubicaciones lo suficientemente cerca del punto de necesidad para admitir los requisitos de baja latencia de las aplicaciones que los utilizan. Esto permitirá que las aplicaciones con esos requisitos se ejecuten directamente desde los servicios originales de los proveedores de la nube sin tener que construir una infraestructura. La introducción y la propagación de puntos de servicio en la nube similares a los de los cajeros automáticos se puede considerar como una implementación específica del edge computing, que continúa creciendo rápidamente.
A medida que comienza la nueva década, los directores de innovación deben considerar la manera en la estas tendencias influirán en sus planes de migración y adopción de la nube en los próximos años, tomando medidas ahora para preparar su infraestructura de TI para el futuro de la nube.